En el 85 % de los partos vaginales ocurren lesiones perineales que, sean quirúrgicas (episiotomía) o no, requieren sutura. Ni que decir tiene que el 15 % que no presentan estas lesiones suelen ser mujeres que dan a luz a su tercer hijo o más.
Es por este motivo que se han creado cierto tipo de prácticas que tienen como finalidad aumentar la flexibilidad del periné, disminuyendo así la tensión que estos músculos tendran en el momento del parto.
Es conocido el masaje perineal y algún dispositivo como el que presento ( nombre comercial epi-no). Se trata de un balón inchable de silicona, conectado a una perilla y aun regulador.
Un grupo de ginecólogos del Hospital de la Zarzuela de Madrid han recogido datos sobre pacientes que han utilizado éstos métodos de prevención de la patología perineal en el parto, y los han comparado con otras pacientes que no los usaron.
Las mujeres que usaron el masaje perineal empezaron en la semana 33 y, tras ser instruídas, realizaron el masaje durante 10 minutos todos los días. Las mujeres que usaron el dispositivo lo hicieron desde las semana 36, también todos los días, pero durante 20 minutos al día.
El resultado fue una disminución del traumatismo perineal en las pacientes que habian preparado su periné, y ningún cambio en los marcadores de control del bienestar del nacido ( apgar, ph fetal.)
Así pués, según estos investigadores el usar estos métodos puede ayudar en la última fase del parto.
Mi opinión es que si bien, son técnicas positivas y favorecedoras del buen pato, no hay nada que ayude tanto como una actitud positiva por parte de la embarazada. Sólo con confiar en quienes la atienden, escucharles e intentar seguir sus instrucciones es suficiente. Cuando la cabeza fetal empieza a distender el periné los problemas reales suelen esar todos resueltos.
Aun así si tienenes tiempo y ganas. No lo dudes. Prepárate.