El brote vivido este verano en España ha hecho que las embarazadas se preocupen por esta bacteria.
Cierto es que las mujeres embarazadas tienen la inmunidad deprimida, y así son más vulnerables, como los ancianos y otros inmunodeprimidos, a las infecciones.
Esta bacteria que a menudo cursa como un cuadro de gasroenteritis con fiebre muy alta y que con unas defensas en forma no pasa de ahí, puede provocar situaciones mas graves en estas personas como : meningitis, endocarditis, neumonia, abscesos y en embarazadas muerte fetal o aborto.
Sin embargo si seguimos las directrices habituales con los alimentos es altamente improbable que comamos alimentos infectados.
- lavemos bien las verduras y cocinemos bien los alimentos (con temperaturas superiores a los 70º
- Lavemos nuestras manos después de tocar a los animales.
- Mantengamos nuestro frigorifico por debajo de los 4º
- No consumir nunca leche no pasteurizada ni los quesos que se fabrican con ellas.
- Si consumimos productos precocinados listos para el consumo, conviene calentarlos bien., que salga vapor de la comida)
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